CULLERA

En esta entrada os presento Cullera, en la comunidad Valenciana. 

Estuvimos aquí unos días del verano de 2013. 

Cuando llegamos a Cullera, nosotros, que somos del norte, lo primero que notamos es ese tipo de calor tan propio de la costa mediterránea, calorcillo pegajoso que pudimos sentir incluso en el volante del coche según bajamos la ventanilla.

Cullera es un lugar de playa,vacacional, en el que la población en verano aumenta de manera considerable. Por eso mismo, uno de los fallos que le vimos es la falta de previsión de aparcamiento para toda esa gente que acude en vacaciones buscando como refrescarse, por lo menos en temporada alta tendrían que tener un plan previsto para acoger a los visitantes y a sus coches, así que si os decidís a visitarlo ir cargados de paciencia, y echarle imaginación a la hora de aparcar, ya veréis que los coche se colocan donde buenamente pueden, eso sí, por lo menos en los días que estuvimos allí, aunque aparcamos fuera de lo que podríamos considerar "un aparcamiento normal", no nos multaron.

 En estas primera imágenes podéis ver el paseo de la playa por la noche.
Este es el mejor momento para salir a caminar ya que la temperatura por la noche baja "algo", no mucho, aunque cuando estuvimos allí si lo suficiente como para que el cuerpo lo notase y lo agradeciese.
Por la noche, en el paseo, podréis encontrar bastantes puestecillos para comprar pulseras, collares, cintos, bolsos, playeros...También podéis encontrar restaurantes para cenar, heladerías, bares, incluso alguna tienda abierta.
 La verdad es que hay mucho ambiente, tanto de jóvenes como familiar, que puede alargarse hasta altas horas de la madrugada.

Como íbamos con nuestra perreta, tuvimos que buscar un hotel donde alojarnos que permitiesen animales,  Nos alojamos en el Hotel L' Escala, donde nos atendieron estupendamente, la chica de recepción fue muy amable y nos facilitó en todo lo posible la estancia. (en la entrada del hotel tenéis mas datos)

ENLACE PÁGINA HOTEL L´ESCALA

Al tener que alojarnos en ese hotel descubrimos esta pequeña playita que podéis ver encima de estas líneas, muy tranquilita y aunque más pequeña con la orilla menos masificada que la de la playa principal de Cullera.

En Cullera podéis encontrar también un Castillo de la época califal (siglo X) y un Santuario. No os puedo comentar como era el castillo por dentro ya que como íbamos con la perrina no pudimos pasar.

Desde el alto en el que está situado el castillo de lo que si pudimos disfrutar es de las fenomenales vistas del pueblo y de la costa.

 Sobre estas líneas las vistas del casco antiguo de Cullera, con un bonito colorido y contraste entre el blanco de las paredes de muchas de sus casas y el color de toldos, terrazas y tejados.

 A pesar de que en la costa Mediterránea suelen asegurarnos el buen tiempo, también podemos encontrar estas tormentas de verano, que seamos sinceros, a veces se agradecen... Esta tormentilla asustó más de lo que luego fue, bastante ruido de truenos, unos 5 minutos de gotas gordas y unas nubes que pasaron rápido y se perdieron tal como vinieron por el Mediterráneo, y eso si, bastante viento.

Vista del Castillo y el Santuario.

Pasando el faro de Cullera, nos acercamos ya a lo que es la albufera valenciana y allí encontramos esta playa con una zona de Dunas protegida. Cuando fuimos, después del paso de la tormenta, no tuvimos problemas para aparcar ya que la mayoría de la gente había marchado, aún así no vimos que hubiera demasiado sitio, así que si os decidís por esta playa, menos comercial que la principal de Cullera, contar también con que aparcar os llevará un rato, aunque personalmente, creo que os merecerá la pena.

Sobre esta líneas tenéis la playa de Cullera.

De esta playa salen cada poco callejuelas donde también podéis encontrar restaurantes donde comer, no recuerdo el nombre del restaurante en el que comimos, tenia una terraza cubierta no por toldos, sino que salia del propio restaurante, pero el menú del día estaba muy bien de precio y muy bien de cantidad y calidad. La pena fue que como estaba tan bien de precio y calidad solo pudimos comer allí un día ya que los demás estaba al completo y con mesas reservadas desde primera hora.

 En la playa no tuvimos problema para colocar la toalla ya que es bastante ancha, pero, como hacía muchísimo calor, todo el mundo busca colocarla a la orilla por lo que si no vas a primera hora tendrás que colocar tu toalla detrás de un montón de gente. Además los paseos por la orilla pueden llegar a complicarse ya que muchas personas colocan su toalla casi casi en el agua.

Como en este blogg también hago mención a viajar con nuestra pequeña Luna, lo que si me queda comentar es que playa para ir con ella no hay en Cullera, nosotros conseguimos bañarnos porque nos turnamos para esperar fuera cuidándola, que sino...

Abajo podéis ver una foto de la situación de la orilla.

Vista del castillo y Santuario desde el paseo de playa.

 Otro lugar estupendo para las vistas es la estación meteorológica a la que se llega por un camino que sale a la derecha del camino que sube al Castillo. Desde aquí podreis visualizar la playa y gran parte de la costa.

Desde el observatorio, también podéis ver la albufera.